jueves, 8 de septiembre de 2016

Cuestión de sentimientos



No busques luchar contra tus sentimientos, mejor haz que se queden. Sé que muchos de estos pueden doler hasta dejarte un vacío enorme en el pecho con un dolor irreversible, uno que recordaras siempre por el resto de tu vida. 

Tampoco intentes luchar contra ellos porque te aseguro que ganaran la partida, sobre todo si son demasiado fuertes. ¿Que es mas real el dolor insoportable o la felicidad duradera? Yo no lo sé. 

Los sentimientos nos hacen ser quienes somos. No somos ni más que nadie ni menos que nadie, somos diferentes según sean nuestros sentimientos y como los mostremos y eso nos hace especiales. Nos hacen ser personas con sueños, con aspiraciones en la vida, hacen que nos emocionemos con una película, una canción o que nos enamoremos de alguien como si todo fuese un cuento con final feliz, aunque muchas veces no lo tengan...hacen que todo tenga sentido. 

El secreto esta en las ganas, sí, en esas ganas que le pones a la vida, a las metas que te propongas conseguir, pero sobre todo sé que esas ganas son directamente proporcional a lo alto que apuntes en la vida y a los sentimientos que le pongas a esas ganas.

Si no arriesgas no ganas.

Con el paso de los años vas descubriendo que no todo son arco iris y unicornios, princesas y príncipes, hadas o brujas, malos o buenos. No, estoy cansada. Quiero cosas que valgan la pena, cosas simples y complicadas que me hagan luchar para conseguir mis propios objetivos, quiero un amor real, que dure lo que tenga que durar pero que mientras dure sea una locura y me aporte cordura a la vez. Una amistad que tenga un principio y que si tiene que ser eterna, lo sea y si no que se vaya, ya vendrá otra. Quiero vivir sin que me juzguen o me cuestionen constantemente. Me cansa tener que pensar que es lo que me agrada a mí y como le sentará a los demás. Intento no hacer daño a nadie y que mis decisiones solo me afecten a mí sin causar daños colaterales. 

Me quiero yo y con eso es suficiente, porque al fin y al cabo somos individuos y la vida te enseña a base de hostias que yo soy la única persona que siempre estaré conmigo. Fallaré y me caeré cientos de veces pero la verdad, no me importa caerme mil mas porque cada vez que me levanto soy más fuerte y cada vez sé caer de mejor manera para hacerme el menor daño posible.
Sé muy poco de todo, tengo mucho que aprender aún, pero si algo estoy aprendiendo es que mostrar los sentimientos vale la pena, vale la pena llorar por amor, por decepción, de alegría o de pena y desahogar al alma de tanta carga, luchar por las personas que le dan magia a nuestra vida, amar con el corazón y con el alma, formar parte de algo más grande de lo que jamas imaginaste, pero sobre todo, merece la pena arriesgarlo todo por lo que crees. Y yo creo en mí.


No intentes jamás apagar tus emociones porque luego encenderlas de nuevo te costarás mucho mas y te será mucho mas difícil que antes. Lo sé por experiencia.

Sentir duele, pero no sentir...no sentir, mata.




No hay comentarios:

Publicar un comentario