Pre y Post celebraciones.

                                          Siguiendo una línea, aunque de vez en cuando te salgas.

Hace poco tuve una charla con una de las muy pocas personas que me conocen de verdad. Sabe de mis pesares y mis alegrías, de mis preocupaciones y de mis proyectos, de mis amores y desamores, de mis miedos y mis inseguridades y de todo lo que soy capaz de llegar a hacer.

Siempre (98%) he conseguido lo que quería, igual es que mis aspiraciones tampoco han sido tan ambiciosas (no creo que sea eso, sinceramente). Pero desde hace un tiempo aquí, me he vuelto más temerosa, soy muy echada para delante para muchas cosas, me atrevo y me tiro a la piscina si creo que merece la pena, pero ultimaménte hay algún aspecto en el que los miedos a perder me paralizan. Será que he perdido mucho en muy poco tiempo.

Esta persona me decía una y otra vez: Elena, no te conozco, esta no es la Elena que lo controlaba todo y si no le convenía cambiaba de dirección.

Y es que hay cosas que han cambiado y mucho en estos últimos tiempos. Pero sí tiene razón en que el miedo que era algo que sólo conocía de oídas, ahora en según que cosas me puede. No me llega a paralizar, pero si me lo tomo con mucha más calma.

Ha habido un episodio en mi vida que he manejado de la peor manera y aunque quiero dejarlo atrás, es algo que me ha marcado para siempre. He visto a la mejor y a la peor Elena de toda mi vida. Es algo difícil de entender y mas difícil de explicar.

Pero para una persona íntegra, honesta y tan de verdad como yo, esto me ha marcado y aunque he aprendido mucho con ello y he pagado una factura muy alta, no deja de ser una parte de mi pasado que ha influido en mi presente y en mi forma de ser.

Por eso me he vuelto más cautelosa y miro a los demás, a los que quiero antes que nada, por encima de todo están ellos.

Quizás este post sea un poco enrevesado pero así soy yo y después de esa charla con esta persona me ha hecho ver en un espejo a la Elena de ahora....y os aseguro que me encanta. A pesar de los bajones, a pesar de los vacíos, a pesar de la nostalgia. Estoy haciendo una Elena que me gusta cada día más y de la que me siento más orgullosa.

Ahora viene mi cumple, no estaré para celebrarlo con mi gente. Por eso hoy he hecho una precelebración con mi familia y mis sobrinos con tarta de chocolate, velas y regalos, luego habrá más celebraciones pero estás serán post-cumpleaños.

Creo que estoy en uno de los momentos más importantes de mi vida y de lo que haga ahora y como actúe en este momento dependerá mi futuro más inmediato y quizás mi felicidad. 

Es el momento de hacer realidades, de hacer posibles y de luchar de verdad por mi vida, por la vida que siempre he querido pero no sabía cual era.

Menudo ladrillo el de hoy, pero es lo que tiene cumplir años que se convierte en momentos coyunturales y decisivos.

Yo sigo en esta línea nueva que me he marcado en mi vida, aunque para algunas cosas le tenga que dar tiempo al tiempo.