A unos días de la Navidad y no hace frío, al menos ese que corta la cara. Yo no lo siento y quiero que haga frío, me gusta, necesito acurrucarme en una bufanda, usar los guantes, calcetines gordos...pero no, no hace ese frío.
Me gustaría ir a Laponia, siempre he querido conocer Laponia y la aldea de Papá Noel. Ya, ya sé que no me pega, pero siempre he sido y espero seguir siendo más infantil que adulta. Llevar camisetas térmicas, ir enfundada en un pluma hipercalentito y con botas que te mantienen los pies calientes. Ah, y subir en trineo...de verdad que me gustaría. Creo que no se lo había dicho a nadie, pero es uno de mis lugares que siempre he soñado visitar.
Hace poco lo decía en el pie de una foto. Me ha gustado tanto la Navidad toda mi vida que ahora no la soporto, y desde hace unos años no adorno mi casa, ni soporto los villancicos, y la cena de Nochebuena es una cena más, el fin de año es como ir de puente a alguna casa rural....pero este año es distinto. Sigue sin apasionarme como antes, pero algo está empezando a cambiar.
He puesto en casa un mini rincón navideño un tanto peculiar, he adornado un candelabro-arbol de hierro y cristal con los restos de adornos que he encontrado, he desempolvado las figuras del nacimiento, (sólo el misterio y con la mula y el buey, seguramente por llevar la contraria), unas flores de pascua y velas, muchas velas.
Quizás sea porque este año cuando pasemos del 2012 al 2013 sí que será un "año nuevo, vida nueva" literalmente.
Cambio de vida, cambio de ciudad, cambio de trabajo, de gentes, de acentos, de aires.....ya sí, ya está hecho: cuando pasen los Reyes cambio mi ciudad sureña por el norte.
¿Y sabeis qué? Por primera vez en mucho tiempo, años diría yo, puedo decir con la voz en grito que estoy ILUSIONADA.
Los sueños se convierten en proyectos y algunos de esos proyectos en realidades...y soñando y haciendo y tomando decisiones mi realidad ha llegado. De momento es el norte, más adelante quién sabe....
No hay comentarios:
Publicar un comentario