viernes, 28 de diciembre de 2012

Por fin!!!!!




Todos sabéis que internet es la ventana al mundo en cualquier aspecto para la mayoría de nosotros, es el presente y la herramienta que utilizamos para todo. Comprar, consultar, gestionar, cotillear, curiosear y sobre todo comunicarnos y relacionarnos con personas que pueden estar cerca o lejos.

Yo como soy una persona adaptada a mi tiempo, hace mucho que utilizo este medio para todo lo anterior. Incluso para enamorarme.

Y así empezó todo. En una red social nos conocimos, al principio como la mayoría lees lo que escribe, luego le contestas a algún comentario, te ríe alguna gracia y pasamos a privado. Así empezamos a conocernos, hablando de nuestras cosas, nuestros gustos, bromas, risas, conversaciones serias...hasta que se convirtieron en chat de horas. De ahí pasamos al teléfono y a conversaciones a través de Skipe.
Nos gustamos desde casi el primer momento porque la conexión fue fácil e inmediata y cada vez necesitábamos más el uno del otro.
Yo estaba saliendo de una situación muy complicada y difícil de mi vida y él me ayudó a ver las posibilidades que la vida me ofrecía, a cambio yo le abrí los ojos en algunos aspectos de la suya que tenía bastante herméticos.
Luego vino la necesidad de quedar en persona y elegimos una ciudad neutral. Madrid. Todo fluyó como si fuese lo más natural del mundo, ya que después de tantas horas de conversaciones y tanto como sabíamos el uno del otro parecía que llevásemos toda la vida juntos.
La separación fue muy traumática porque teníamos que volver cada uno a su ciudad y estábamos en una punta del país cada uno. Pero nos las apañamos para encontrarnos todas las veces que podíamos, unas veces en Madrid, otras en mi ciudad y por fin en la suya.

Me enamoró la ciudad, porque de él ya lo estaba y empezamos a mover la maquinaria para poder estar juntos y la decisión fue que lo menos complicado era trasladarme yo y empezar nuestra vida juntos en su ciudad...nuestra ciudad.
Volví para dejar arreglado todos mis asuntos y en menos de dos semanas me voy a vivir con él y lo que es más definitivo es que una semana después de mi llegada...nos vamos a CASAR.
Sí, me caso, en privado, sin boatos, ni parafernalia, él y yo.
Así soy yo y así sabía que sería si alguna vez sucedía.
Ahora sabeis porque me voy a vivir a La Coruña y porque todo ha sido tan de repente y tan definitivo.

Lo cuento ahora porque ya está todo decidido, ya tengo la excedencia concedida, ya tengo el billete de avión y todo atado. No lo hice antes para que no se gafara.

Sé que en este momento se están enterando mis amigos y mi familia si es que me leen. Espero que me perdonen por hacerlo así, pero viniendo de mí no podría ser de otro modo.

Sé que los que me quieren de verdad se alegraran por mí y los que no....pues eso.

Sólo quiero deciros y desearos que en la vida tengáis momento de tanta felicidad como la que yo estoy viviendo ahora mismo y que lo disfrutéis porque no sabemos cuando vendrán tiempos peores.

Prometo traerlo a Sevilla para que lo conozcáis y para que veáis porque merece la pena dejarlo todo por amor.





1 comentario: